Cómo servir una cerveza
La tercera capa inferior es una nebulosa de espuma formada por burbujas muy finas. Gracias a esta formación del giste conseguimos que la cerveza no se oxide y que no pierda la carbonización original. Aunque la técnica no varía mucho dependiendo de si la cerveza es de barril o de botella, sí hay que tener en cuenta algunos matices en el momento de tirar una cerveza:
El mejor recipiente para cada cerveza
Para las cervezas de mucha concentración, más grados y de doble o triple fermentación, lo ideal es la copa cáliz.
Para evitar complicaciones, el vaso más versátil sería el modelo Nonic, también conocido como “el vaso de pinta”.
La temperatura del vaso

El almacenamiento
Cerveza de barril
El barril nunca debe transportarse rodando por el suelo, ya que así se altera el producto. Si esa es la única manera de moverlo, una vez colocado en vertical debería estar un mínimo de 72 horas estable. Si no, aparecerá mucha espuma o incluso se puede correr el peligro de que el barril explote.
Cerveza de botella
La botella de cerveza debe guardarse siempre en posición vertical. De esta manera no cogerá el sabor metálico de la chapa. Además, el poco aire que haya en la botella estará en el cuello, la parte más estrecha, por lo que tendrá menos contacto con el líquido.
La técnica
Cerveza de barril
Descartar el primer golpe de espuma
Se debe hacer un pequeño descarte para que el primer golpe de espuma no entre en el vaso. El motivo es porque es el que se ha quedado en el grifo y ha cogido aire del ambiente.
Primer tiempo
La clave de la primera fase del tiraje reside en que la cerveza resbale por el interior de la copa para que no pierda carbónico y apenas genere espuma. El vaso tiene que estar en un ángulo de 45º. Conforme se va llenando, el objetivo es alcanzar el 75% de la capacidad. En ese momento hay que poner la copa en posición vertical.
Segundo tiempo
El objetivo de esta fase es crear la crema de espuma. Para ello, debemos abrir en un 25% el recorrido del grifo. Así conseguimos que caiga un caudal de crema de espuma hasta el borde de la copa, que debe ser de unos tres centímetros.
Cerveza de botella
No descartar el primer golpe de espuma
En el caso de la cerveza en botella no es necesario descartar nada del contenido.
Primer tiempo
Hay que inclinar el vaso 45º y dejar deslizar la cerveza por la pared interior. Cuando estén llenas las tres cuartas partes, se debe poner en posición vertical.
Segundo tiempo
La corona de espuma en botella se consigue colocándola perpendicular a la copa para que la cerveza rompa en el centro. Es importante elevar un poco la botella para que, al caer, genere una corona adecuada. Dependiendo del tipo de cerveza hay que elevarlas más o menos. Cuanto menos carbónico de origen tenga la cerveza más hay que elevarla, pero normalmente se debe servir a una altura de entre 7 y 15 centímetros.